La casa de Ezequiel Mudarra la encontramos en la Plaza Miguel de Cervantes. Fue construida a finales de los años 20 del siglo pasado por el maestro de obras alcalaíno Domingo Sánchez Velasco, conocido como ‘Dominguito’.
Presenta una fachada sobria, de tres plantas, rematada por una baranda sujeta por pequeñas pilastras.
En la planta baja, ventanales rectos y rejas, mientras que en la primera se abren balcones con bella rejería, obra probable de la familia de los Lopera, en la que predominan motivos geométricos y florales. Los vanos de la tercera planta se cierran con simples ventanas y rejas de hierro.
En el interior, azulejos de la casa Mensaque, de Sevilla, y una espléndida escalera en mármol blanco. En una de las fachadas laterales, un bello cierre da paso a un pequeño jardín con una fuente taza y vistas a la plaza de la Iglesia.